Cómo hacer una mesa de centro-librero artesanal con materiales reciclados
Las bellas cosas de factura artesanal calientan el corazón. El calor de las manos se transfiere a las cosas.
Byung-Chul Han

Materiales:
- Un pallet
- Vidrio triple
- Vidrio doble
- Cuatro cajones de madera
- Ocho ruedas con base para muebles
- Diez escuadras de fijación pequeñas
- Tornillos
- Clavos
- Lija
Instrucciones:
1. Lijar cada centímetro de superficie lijable del pallet y los cajones.
2. Clavar los cajones sobre el pallet, en posición horizontal y con las caras abiertas hacia “afuera” o hacia los lados. (También se podrían dejar los cajones en posición vertical, lo que les daría mayor apariencia de patas y dejaría más espacio para meter libros con lomos más altos, sin embargo, como mesa de centro la superficie quedaría demasiado arriba.)


3. Atornillar dos ruedas en cada cajón, en las caras que quedan mirando hacia “arriba”. Pueden ser más o menos ruedas, de menor o mayor tamaño en cada caso, pero deberán aguantar el peso de todo el aparataje -pallet, cajones y libros-. Además el peso debe quedar bien distribuido.


4.Voltear el mueble. Medir el espacio rectangular que queda en el “nivel inferior” e insertar un vidrio con las medidas justas. Aquí usamos vidrio transparente tradicional de grosor doble. Menos que eso no recomendaría y más me parece un gasto innecesario.


5. Medir el ancho y largo del pallet. Instalar encima otro vidrio con las medidas adecuadas. En este caso usamos vidrio triple por razones obvias.


6. Atornillar las escuadras de fijación pequeñas en el pallet. Deben sostener las esquinas del vidrio superior y los bordes del vidrio inferior .



Voilâ!


Por supuesto, como bien dijo don José Piñera, todo es perfectible, hasta la Capilla Sixtina. Se podrían modificar varias cosas: el tipo de pallet, el tipo de vidrio, el grosor de estos, colocar más escuadras con fines estéticos, etc. Aquí es donde entrará en juego la inventiva de cada uno. Más que mal, esta mesa se construyó sobre la marcha y de forma totalmente improvisada, nada más inspirado por la existencia de un pallet bonito previamente guardado y la necesidad de tener donde dejar algunos libros, revistas, el café y los pies.